La vida no me va bien como a mucha gente, pero a pesar de ello sigue gustándome la Navidad aunque intento alejarme cada vez más de la parte materialista que nos vende la sociedad. Valoro mucho más los detalles sencillos y en estos momentos de mi vida me conformo con estar tranquila compartiendo mis momentos con la persona que vela por mis sueños, esos sueños que a pesar de todo no me abandonan y siguen dando vueltas en mi cabecita de chorlito esperando su oportunidad.
Hace tiempo que pienso en una casita pequeña quizás de madera donde el tiempo se detenga. En la puerta una campanita para llamar y una jaula en forma de corazón donde el cartero deposite las cartas. Cerca de la casita varios árboles donde cuelguen casitas para los pájaros y sus crias. Quizás un pequeño porche de madera donde sentarme con mi amor a disfrutar de las vistas, montañas nevadas y hierba de un intenso verde que me ciegue.
Tengo la necesidad de sentarme en el porche de esa casita y simplemente no hacer nada, solo dejarme llevar por las sensaciones y únicamente prestarle atención a lo que realmente me haga feliz que en ese momento puede ser observar a una mariquita como se posa en mi mano.
Me gustaria que la casita se integrara perfectamente en el entorno donde estuviera ubicada, no querria que desentonara con colores chillones que molestara a la Madre Naturaleza. Pasar un poco desapercibida para convivir en armonia, esa es la idea.
Pero reconozco que es una utopia el vivir así y más en el país donde estoy. Ya aprendí hace tiempo que muchas de las cosas que sueño e imagino son imposibles de realizar aunque no desisto pues soy muy cabezota y no me detiene ni el caballo de Atila cuando se me mete algo entre ceja y ceja. Hay que buscar alternativas. Ya que no puedo plantar una casita en medio de un bosque he pensado en alquilar una parcela de un camping que esté situado en la montaña. Si pudiera ser una parcela con setos altos alrededor para tener cierta intimidad seria perfecto y ya por pedir algun arbolito donde colocar las casitas para pájaros o quizás poder recibir la visita de alguna ardilla.
Las Caravanas no me seducen del todo por la forma que tiene el habitáculo, lo bueno es que puedes ir con ellas a todas partes aunque en España tampoco te dejan plantarlas donde quieras. El precio es mucho más económico que el de otras opciones.
El tema de los Módulos tampoco estaria mal aunque no me convence al cien por cien porque son todos muy parecidos tanto por dentro como por fuera y si quieres algo diferente los precios se disparan. Podria comprar uno incluso de 2ª mano que no esté muy trotado, acondicionarlo bien por dentro y customizarlo a mi gusto para que pareciese una casita acogedora. El accesorio del porche me gusta mucho.
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